El desastre se registró en la localidad de Liangshui, en el noreste de la provincia de Yunnan. Se recuperaron nueve cadáveres y unas 500 personas fueron evacuadas de la zona.
Los equipos de rescate realizaron labores para encontrar a las cerca de 47 víctimas que habían quedado sepultadas, informó la oficina de prensa del condado Zhenxiong.
Según los reportes, ocho de los cadáveres pertenecían a personas que quedaron sepultadas inicialmente por el alud, pero no se precisó dónde se encontró el noveno cadáver.
Los deslaves, a menudo causados por la lluvia o por obras de construcción inseguras, no son infrecuentes en China. El año pasado murieron al menos 70 personas en deslaves, más de 50 de ellas en una mina a cielo abierto de la región china de Mongolia Interior.