La familia Fortanelli, propietaria del paraje Cascadas de Tamasopo, ha sido blanco de críticas en redes sociales por la duplicación de precios y las nuevas restricciones impuestas para la próxima Semana Santa, pues subieron a 160 pesos la entrada por persona, además de 100 pesos de estacionamiento, casi el doble en relación al año pasado.
Además usuarios de Facebook denunciaron el mal estado de los chalecos salvavidas que se rentan de manera obligatoria en el lugar, señalando que están «apestosos y en malas condiciones», sin poder hacer nada al respecto pues está prohibido el ingreso de diversos artículos como chalecos salvavidas, hieleras, alimentos y bebidas, lo que ha generado molestia entre los visitantes.
Las críticas también apuntan a la sobreexplotación del paraje natural, señalan que han construido cabañas, zonas de camping, restaurantes y tirolesas, alterando el ecosistema y desplazando a la fauna silvestre.
Se cuestiona la falta de transparencia en el manejo de los recursos económicos generados por el paraje, ya que no se ha presentado rendición de cuentas sobre el uso del agua y las ganancias obtenidas. Las construcciones realizadas en la zona han impactado negativamente el ecosistema del río Gallinas, incluyendo la destrucción de la ribera y la alteración del hábitat de la fauna silvestre.
Los turistas que buscan opciones más accesibles o con menos restricciones se encuentran con pocas alternativas en la zona, lo que limita sus posibilidades de disfrutar del paraje natural.
A pesar de las denuncias, las autoridades como Profeco, Conagua y la Secretaría de Turismo no han intervenido para regular precios, costos y verificar el daño ambiental causado, aunque las nuevas restricciones y el aumento de precios podrían tener un impacto negativo en el turismo de la región, especialmente en la temporada vacacional.
