El asesinato de Jesús Eduardo Franco Lárraga, presidente municipal de Tancanhuitz, y tres personas más ocurrido el domingo 15 de diciembre en la autopista Ciudad Valles-Tamazunchale ha generado versiones encontradas entre el gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo Cardona, y la Fiscalía General del Estado (FGE). Mientras el mandatario estatal asegura que el crimen fue resultado de una riña entre particulares, la Fiscalía sostiene que el móvil es de índole personal y mantiene un enfoque reservado sobre las detenciones.
El Gobernador afirmó que el ataque no está relacionado con el crimen organizado, sino con conflictos internos en el Cabildo del municipio e informó que varias personas ya fueron detenidas y se espera la captura de otros dos presuntos responsables en las próximas horas. «No es un tema de partidos, es un tema de seguridad pública», subrayó.
Por su parte, la titular de la FGE, María Manuela García Cázares, aseguró que las investigaciones apuntan a una motivación personal detrás del homicidio y descartó vínculos con la delincuencia organizada. Además, indicó que se han realizado avances significativos gracias a testimonios y labores de inteligencia, pero evitó confirmar las detenciones mencionadas por el gobernador. “Por la misma naturaleza de la investigación, decidimos reservar esa información”, explicó.
La Fiscalía detalló que el caso sigue en proceso, con una carpeta de investigación que incluye declaraciones de familiares y testigos. García Cázares señaló que el Ministerio Público y la Policía de Investigación trabajan en esclarecer los hechos con apoyo de la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.
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