El día de ayer en la entrada de la Unidad Administrativa Municipal (UAM), Lidia Sánchez Ruiz, propietaria del negocio La Fortuna ubicado en la Plaza Alhóndiga 17, se encadenó a un barandal con el propósito de exigir se tomen medidas respecto al ambulantaje, pues denuncia que vendedores obstruyen el paso a su establecimiento y esto le ha representado perdidas del mas de 50 por ciento.

Señaló que desde el comienzo de la pandemia han tenido perdidas debido a que no se regulariza a los comerciantes informales y que su tienda actualmente está rodeada por 14 de ellos, indicando que se trata de la más invadida del lugar.

Indicó que desde hace un año recurrió a la entonces encargada de la Unidad de Gestión en el municipio, Rocío Zavala García, así como también lo ha hecho con el ahora encargado, Gonzalo Bárcenas para que se apoye en la reubicación de estos comerciantes ambulantes, pero ambos han hecho caso omiso a su petición.

Debido a esta situación es que decidió encadenarse frente a la entrada de Unidad Administrativa Municipal hasta lograr obtener una audiencia con el presidente interino, Alfredo Lujambio Cataño, y sea resuelta su denuncia.