Un hecho que ha generado conmoción e indignación en la comunidad LGBTQ+ de San Luis Potosí ocurrió la noche del miércoles en la Plaza de Armas, donde un elemento de la Guardia Civil Municipal presuntamente agredió a una persona queer que se encontraba practicando «Vogue».
La versión de integrantes de la comunidad LGBT+, apunta que alrededor de las 8:20 p.m., un oficial de la policía municipal, interceptó a un grupo de personas que estaban bailando «Vogue» en el kiosco de la plaza, señalándolos de «acosar sexualmente» a los transeúntes por su forma de bailar, motivo por el cual presuntamente agredió a una de las personas amonestadas.
Testigos en el lugar señalaron que el oficial en ningún momento quiso identificarse y les proporcionó dos nombres falsos: primero Rafael Trujillo y después Juan Francisco Torres Pérez. Ante dicha versión, integrantes de la comunidad LGBT+ expresaron su indignación en una rueda de prensa ofrecida la noche de este miércoles, en donde señalaron a la Policía Municipal como homofóbica, asegurando que este ataque se da en pleno mes del Orgullo LGBTQ+, lo que lo hace aún más grave.
Al respecto la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) del Ayuntamiento capitalino informó que inició un proceso de investigación interna para deslindar responsabilidades. Sin embargo, la versión que ofrece la dependencia difiere de la de los testigos y la comunidad LGBTQ+.
La SSPC afirma que los agentes acudieron al lugar tras la denuncia de un menor de 7 años, quien señaló haber sido agredido verbal y físicamente por la persona que se encontraba en el kiosco de la Plaza de Armas. Al llegar al lugar, la persona señalada presuntamente comenzó a agredir verbal y físicamente a los oficiales, quienes aplicaron «el uso de la fuerza razonada» para controlarla. La dependencia también señala que algunos transeúntes interfirieron en la labor policial y que el tutor legal del menor decidió no proceder legalmente contra la persona señalada por las agresiones.
Las organizaciones LGBTQ+ exigen justicia para la víctima y piden que se investiguen a fondo los hechos, además, demandan que las y los agentes municipales se identifiquen en todo momento y que se ponga fin a las agresiones contra la comunidad LGBTQ+. Debido a la gravedad de las denuncias y las contradicciones entre las versiones, la SSPC ha dado vista a la Coordinación de Derechos Humanos del municipio para que se garantice la perspectiva de género durante el proceso de investigación y que se esclarezcan los hechos.
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