Jason Lee Beckwith, un estadounidense sin experiencia previa en España ni dominio del idioma, decidió cambiar su vida al comprar un pueblo abandonado en Zamora por 310.000 euros. “Aunque parezca una locura, supe que era mi destino”, declaró a EFE.
Salto de Castro, un antiguo poblado hidroeléctrico con 44 viviendas, un hotel, un bar, una piscina y una iglesia, quedó deshabitado en 1989. Ahora, Beckwith y su esposa, originaria de Brasil, serán los primeros en empadronarse allí en más de 20 años.
Beckwith, que trabajó en una imprenta antes de emprender un exitoso negocio de alojamiento en EE.UU., encontró el pueblo por casualidad en un anuncio. Aunque su esposa esperaba que cambiara de opinión al verlo en persona, él confirmó su decisión al recorrer sus calles.
Su ambicioso proyecto incluye la apertura de un hotel, un albergue, viviendas de temporada y espacios para nómadas digitales. La restauración, que costará entre cinco y seis millones de euros, respetará la arquitectura original y el entorno natural. “No vamos a construir Disneyland”, aseguró.
A pesar de ser californiano, Beckwith quiere integrarse plenamente. “Amo España y quiero ganarme mi lugar aquí”, afirma. Para simbolizar su compromiso, se tatuó “Don Castro” en el brazo, un recordatorio de su sueño cumplido.
Te recomendamos leer https://www.crmnoticias.com.mx/polemica-en-japon-por-samurai-negro-en-assassins-creed-shadows/