El empresario Luis Oswaldo Espinoza Marín, originario de Jalisco, se suicidó tras confesar haber incurrido en el delito de fraude.
Mediante un video el dueño de Asesores Jurídicos Profesionales (AJP) reconoció que derivado de la pandemia de COVID-19, en los últimos cuatro meses no pudo cubrir las prestaciones que había contraído
«Sobrehipotequé los inmuebles que con fruto de sus inversiones adquirí. Actualmente ya no puedo seguir adelante, todo el dinero que me dieron en inversiones está invertido en bienes raíces que están hipotecadas”, aceptó.
La Fiscalía del Estado de Jalisco había recibido denuncias por el delito de fraude, de 130 presuntas víctimas de Asesores Jurídicos Profesionales.
Tras un cateo a su casa elementos policíacos fueron recibidos con disparos por arma de fuego, pero una vez que lograron ingresar a la propiedad encontraron a Luis Oswaldo Espinoza muerto junto a un arma de fuego, una nota póstuma y una identificación oficial.