Luego de que se filtrara en redes sociales un video en donde presuntamente se exhiben restos de una fiesta en las oficinas del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI en San Luis Potosí, Alberto Rojo Zavaleta, secretario técnico del Consejo Político Estatal del PRI, se apresuró a desmentir la autenticidad reciente del material y apuntó los dardos contra el alcalde Enrique Galindo Ceballos, a quien acusa de orquestar una «campaña negra» en contra del partido.
«En política no hay casualidades. Justo cuando el Tribunal Electoral ratifica la legalidad de la expulsión de Enrique Galindo del PRI, aparece este video», declaró Rojo Zavaleta, insinuando una maniobra política detrás de la filtración.
El funcionario priista minimizó la grabación, asegurando que el área mostrada no corresponde a la oficina de la dirigente estatal, la diputada local Sara Rocha Medina. Según él, se trata de un video viejo usado para desacreditar al partido. «Un bote lleno de cervezas no puede opacar el trabajo que hemos hecho», justificó.
Mientras el PRI enfrenta tres demandas legales, Rojo Zavaleta insistió en que todas han sido promovidas por el mismo abogado, aunque negó que se trate de José Mario de la Garza, ligado a administraciones municipales de Galindo Ceballos.
Por su parte, el subsecretario de Organización del PRI en SLP, Héctor Gregory López Tovar, calificó el escándalo como una «guerra sucia» contra la dirigencia actual, aunque descartó una conspiración interna. También anunció que reforzarán las medidas de seguridad dentro del partido.
El toque final lo dio el propio López Tovar, quien, lejos de mostrarse preocupado, invitó a los presentes a brindar con unas micheladas en su oficina para celebrar su cumpleaños. ¿Cinismo o confianza absoluta? El tiempo lo dirá.
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