Escrito por Magui Zacarías
El Barrio de Santiago se vio envuelto en un impactante suceso ocurrido la noche del 26 de febrero, que dos jóvenes, de 13 y 17 años, escaparon de la Casa de Salud Mental «Dina Belanger», ubicada en Aquiles Serdán 825, en el Barrio de Santiago.
Lo que inicialmente parecía un intento de asalto, como se observa en un video publicado ese fin de semana, se convirtió en una escalofriante revelación: las chicas eran pacientes del centro y denunciaron terribles experiencias de maltrato físico y psicológico, según relataron a los vecinos una de ellas llevaba medio año sin contacto con su familia, mientras que la otra no recordaba cómo llegó al lugar, ambas presentaban signos de violencia física.
Las jóvenes les indicaron que ya habían intentado escapar en el pasado y buscaron ayuda en la Fiscalía del Estado, sin éxito, presuntamente porque la dueña de la clínica, tiene influencias en el sistema judicial, lo que impidió que las autoridades intervinieran.
La situación se tornó aún más tensa cuando la encargada de la clínica, sin mostrar identificación, presuntamente intentó llevarse a las jóvenes, amenazó a los vecinos que intentaban ayudar y mencionó una supuesta complicidad de la Fiscalía con la clínica, además un trabajador del lugar, acorralado, admitió el maltrato a las pacientes, reconociendo que no solo ellas eran víctimas de la situación.
A pesar de la llegada de la Guardia Civil, que resguardó a las jóvenes, el personal de la clínica se negó a proporcionar información. La aparición de una mujer que se identificó como la psicóloga e hija de la dueña, no hizo sino aumentar la confusión al no mostrar identificación y referirse a las chicas como «loquitas».
Hasta el momento, se desconoce el paradero de las dos jóvenes y la situación de los demás pacientes del centro. La Fiscalía General del Estado no ha ofrecido detalles sobre el caso, lo que genera incertidumbre y preocupación.
Las denuncias de las jóvenes han desatado una ola de indignación en la comunidad, que exige una investigación profunda del caso, que esclarezca los hechos y asegure la protección de las víctimas. La Casa de Salud Mental «Dina Belanger» se encuentra bajo el escrutinio público y las autoridades deben actuar con firmeza para garantizar el bienestar de todos los pacientes.
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