En los primeros cinco meses del año, el Estado de San Luis Potosí registró 298 homicidios dolosos, mil 648 lesiones dolosas, nueve secuestros, 266 abusos sexuales y 12 feminicidios, estadísticas que nos hacen notar que el comportamiento delictivo en la entidad, sigue siendo muy penoso y nos mantiene en la zozobra.

El coordinador de la bancada panista en el Congreso del Estado, Rubén Guajardo Barrera, apunta que sigue habiendo desinterés por resolver estos problemas que intranquilizan cada vez más a la sociedad potosina.

Apenas, se actualizó el informe mensual de la Incidencia Delictiva del Fuero Común que presenta el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, donde se insiste que estamos en la media Nacional de las entidades más sangrientas del país.

Los datos anteriores, hacen cuestionarse porqué sigue fallando el sistema de seguridad pública y el de justicia en el Estado «nos preocupa que el clima y el control de la violencia no pueda ser atacado por los cuerpos de seguridad de los diferentes órdenes de gobierno, porque ello demuestra que las políticas públicas, nunca terminaron de cuajar y pudiera ser, debido a que se adoptan más medidas represivas que abordar las verdaderas causas del fenómeno delictivo”.

Aunado a ello sigue sin haber una cabeza que atiendan de raíz lo que está sucediendo en la entidad, como asaltos, secuestros, robos ejecuciones y feminicidios.