Antes de que concluya este periodo ordinario de sesiones, el Congreso del Estado desahogará asuntos agendados y avanzará en el trámite de otros relevantes como la reforma electoral.
A un año de las elecciones “en las que los ciudadanos decidieron cambiar el rumbo del estado para bien, con una nueva propuesta política, hemos entendido y atendido el mensaje de los ciudadanos que quieren la transformación de San Luis”, manifestó el presidente de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) diputado José Luis Fernández Martínez.
“Hemos sacado adelante iniciativas de fondo para la transformación de San Luis a través de amplios consensos, incluso por mayorías que en otras circunstancias eran imposibles de conseguir, como el ejemplo de la Guardia Civil que llegó como una iniciativa emanada del Ejecutivo, que después los diputados, Cabildos y amplios sectores de la sociedad hicieron suya”.
Otro tema relevante es la gratuidad de las licencias y las placas de circulación en beneficio de la ciudadanía, “una promesa que hizo el gobernador en campaña y que respaldamos con la aceptación de todos los sectores y así hemos desahogado diversos temas de gran trascendencia e impacto social”.
El diputado Fernández Martínez expuso que “tenemos el objetivo de sacar la mayor cantidad de trabajo de aquí al final del periodo ordinario –a finales de este mes- para tener el siguiente año legislativo con una estadística amplia e incorporar nuevos temas que sigan generando beneficios entre la población”.
“Los temas que están en el tintero son la Ley Electoral que deberá estar lista en septiembre de este año y que está en proceso de consulta con los pueblos indígenas, en un proceso bastante complejo pero saldremos bien librados y con éxito; también se discutirá la creación del municipio 59 que es una inquietud de los habitantes de la Delegación de Villa de Pozos a quienes el gobernador les ha dado voz porque simpatiza con la propuesta a la que se han sumándolos empresarios, los diputados y muchos sectores”.
El presidente de la JUCOPO expuso que otro tema más reciente que se pone como reto es el de la Auditoría Superior del Estado (ASE) que está en crisis y no da para más, ya que es fundamental que la fiscalización de los recursos públicos, de todos los potosinos, sea eficiente, confiable y sobre todo confiable, por lo que la institución será sometida a una reingeniería total.
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