Esta mañana, en la Iglesia de San José, un hombre irrumpió en el recinto con una misión muy particular: atacar la imagen de la Virgen de los Dolores. Su arma, una piedra bien guardada en su mochila. Sin titubear, el sujeto arremetió contra la imagen religiosa, rompiendo el cristal protector y causando daños a una de sus manos. Como era de esperarse, el acto generó un pánico inmediato entre los feligreses, quienes no dudaron en salir corriendo.
El padre Tomás Cruz Perales, vocero de la Arquidócesis Potosina, confirmó que los daños en la imagen son menores (aunque claro, la Virgen no opina lo mismo) y anunció que interpondrán una denuncia por ataque de odio. El suceso quedó grabado en videos proporcionados por la misma iglesia, donde se observa al atacante con su mochila bien colocada, sacando su «proyectil» y ejecutando su movimiento sin dudarlo. Lo que no se observa, lamentablemente, es alguna reacción oportuna que impidiera su escape.
Desde la arquidócesis aseguraron que esto es un acto de odio y, aunque no han decidido aún qué medidas tomar, mientras tanto hicieron públicas las imágenes; los estragos de la agresión fueron visibles: vidrios rotos y una imagen con los dedos fracturados, afortunadamente no se reportaron personas agredidas físicamente.
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