La bacteria estreptococo A ha puesto a Japón en alerta. Se trata de un organismo común, con presencia habitual en la garganta y la piel, que puede provocar infecciones de distintos niveles. Pese a que normalmente no derivan en cuadros graves, también es capaz de generar situaciones de peligrosidad extrema para el ser humano. Es más, puede matar a una persona en 48 horas.

El Ministerio de Salud nipón ha registrado 977 casos de síndrome de shock tóxico estreptocócico (STSS) hasta el 2 de junio. En total, 77 personas habrían muerto a causa de este problema de salud entre enero y marzo, según las últimas cifras publicadas. 

El brote actual genera preocupación en el país asiático, ya que ha superado las 941 infecciones del año anterior, cuando se alcanzaron cifras récord, las más altas desde que se comenzaron a reflejar en las estadísticas oficiales en 1999. No obstante, de momento, no se habría rebasado el número de muertes, situado en 97 en 2023, el segundo mayor dato en los último seis años, según el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas de Japón.

Sin embargo, la situación se podría agravar todavía más. Es más, el experto en enfermedades infecciosas de la Universidad Médica de la Mujer de Tokio, Ken Kikuchi, ha apuntado a que se llegará a los 2.500 casos a finales de 2024.

Todavía no existe una respuesta certera sobre el aumento de casos, pero hay voces que apuntan a la falta de exposición a las bacterias, especialmente a raíz de la pandemia de Covid-19, cuando las medidas sanitarias se reforzaron para evitar la expansión de la enfermedad. Entonces, la mascarilla y la distancia social impidieron las infecciones por estreptococo A. 

Con información de Redacción Médica